BOCA SANA

Mantener una boca sana nos ayuda a tener un buen estado de salud general, ya que el hecho de padecer una enfermedad en las encías incrementa el riesgo de padecer enfermedades graves como infartos de miocardio, ictus, diabetes y partos prematuros.

La saliva nos ayuda a protegernos de los patógenos ya tener bajo control las bacterias responsables de la formación de la placa dental o biofilm, película inicialmente incolora que se adhiere sobre la línea de la encía y que puede calcificarse dando lugar al sarro . La acumulación de esta placa puede causar gingivitis, inflamación de las encías que puede complicarse con infección bacteriana y llegar a afectar a las estructuras de apoyo produciendo periodontitis. Esta afectación a nivel profundo puede acabar dando lugar a la pérdida de piezas dentales si no se tratan correctamente.

Para tener una boca sana es muy importante seguir unos correctos hábitos diarios:

- Antes del cepillarse debemos limpiar los espacios interdentales con la ayuda de seda / cinta dental o cepillos en función del tamaño del espacio.

- Cepillarse los dientes mínimo 2-3 veces al día con un cepillo de filamentos suaves y con las puntas perfectamente redondeadas para evitar lesionar las encías.

- Utilizar un dentífrico fluorado y adecuado a nuestras necesidades.

- Limpiar la lengua con la ayuda de un limpiador lingual para retirar la acumulación de sustancias de desecho y evitar la halitosis o mal aliento.

- Enjuagar la boca con enjuague para reducir el volumen de la placa dental.

- Realizar revisiones periódicas 1-2 veces al año al dentista.

Hay otros aparatos que facilitan y mejoran la higiene bucal como son los cepillos eléctricos, especialmente indicados para la edad infantil y pacientes con movilidad reducida, y los irrigadores que limpian con la ayuda de agua.

En el caso de los niños podemos limpiar las encías con la ayuda de un limpiador específico desde el día del nacimiento y como muy tarde tenemos que empezar la higiene en cuanto salga el primer diente utilizando un cepillo de dientes para bebés y agua. La pasta dentífrica la empezaremos a utilizar cuando él ya sea capaz de escupirla fuera de la boca, lo que sucede alrededor del tercer año.

Para mantener una buena salud general no debemos olvidar realizar una correcta higiene bucal, visitar periódicamente al dentista y tener una consideración especial en aquellas situaciones en las que las encías son más susceptibles de padecer gingivitis, como sería el caso del embarazo, las personas diabéticas y los fumadores.

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